1.1. Epopeyas de la India

En la antigua India la epopeya se caracteriza por el predominio de la fantasía y lo maravilloso. Dos son las muestras principales: El Majábharata y el Ramaiana, escritos en sánscrito.
La epopeya procede de una poesía popular de relatos tradicionales de indudable origen histórico. Estos relatos proceden de la época védica, los recitadores profesionales organizados en castas, los suta, bardos y panegiristas, conductores de los carros durante las guerras, trasmitieron estos relatos épicos, adaptándolos y completándolos. De aquí salieron las dos grandes epopeyas el Majábharata y el Ramáiana. El idioma sánscrito de estas epopeyas está en prosa y en verso; la narración es de forma arcaica, pero los versos narrativos forman la parte más importante; el discurso caracteriza la composición épica y reemplaza el estilo directo, mezclando en él máximas religiosas y conclusiones moralizantes.


El Majábharata

El Mahábharata consta de unos cien mil ślokas ( pareados de versos de dieciséis sílabas). No se conoce con certeza su época de composición, y más bien parecen responder a un proceso acumulativo de ampliaciones. Algunos datan la gestación de la obra en la época de aparición del budismo. Trata sobre las luchas dinásticas entre los descendientes del rey Bharata: los piadosos Pándavas y los malvados Kauravas. Vencen los Pándavas, ayudados por su amigo el dios Krishná. El relato está entreverado de leyendas fantásticas sobre tales luchas y se intercalan bellos episodios como el del rey Nala y su esposa Damaianti, que son perseguidos por el demonio Kali.


El Ramáyana

El Ramáyana es una epopeya tres o cuatro siglos posterior al Majábharata, aunque hay quienes la sitúan en el siglo VIII a. C. Es de extensión más reducida y consta de unas 24.000 śloka. Se atribuye al legendario poeta Valmiki. En él, el príncipe Rāma rescata a su esposa Sītā, raptada en la isla de Sri Lanka por el diabólico Ravana, monstruo de diez cabezas. Siendo una de las más importantes obras literarias de India antigua tiene un profundo impacto en el arte y la cultura del subcontinente indio y del sureste de Asia. La historia de Rama también inspiró numerosas obras literarias modernas en diversos lenguajes, entre los cuales se pueden resaltar los trabajos del poeta hindú del siglo XVI, Tulsidas, y el poeta tamil Kambar, del siglo XIII.

El Cid sale de Vivar


Mío Cid Salió de Vivar a Burgos se ha encaminado,
allí deja sus palacios yermos y desheredados.
Con lágrimas en los ojos muy fuertemente llorando,
la cabeza atrás volvía y quedábase mirándolos.
Y vio las puertas abiertas los cerrojos quebrantados,
y vacías las alcándaras sin las pieles, sin los mantos,
sin sus pájaros halcones sin los azores mudados.
Suspiró entonces el Cid que eran grandes sus cuidados.
Habló allí como solía tan bien y tan mesurado:
"Gracias a ti, señor Padre Tú que estás en lo más alto.
Todo esto me han urdido esos enemigos malos".


Cantar del Destierro (Fragmento)